Un bellísimo vestido largo blanco de Rosita Hurtado para Blanca Soto
que, como siempre, mostraba su acostumbrado toque sexy con una profunda
abertura y un escote revelador. Lo que más llamó la atención fue su
peinado con aires retro, muy romántico, estratégicamente arreglado para
que se viera como una melena corta de los dorados años 50.
Un maquillaje en tonos pasteles completaban el look. Soto fue, sin lugar a dudas, una de las mejores vestidas de la noche.